La Galería Güemes recupera su esplendor
Obra del arquitecto italiano Francisco T. Gianotti (diseñador también de la confitería El Molino) fue construida entre 1912 y 1915, año de su inauguración y fue decorada con materiales, piezas ornamentales y esculturas importadas de EuropaDesde su inauguración brilló con luz propia y fue otro motivo de orgullo para los porteños
Siempre ha estado relacionada, directa o indirectamente con el arte.
Ha sido escenario de varias películas, entre ellas "Se llamaba Carlos Gardel" de León Klimovsky y "Gatica" de Leonardo Favio.
A comienzos de la década del 30 alquiló allí un departamento en el sexto piso Antoine de Saint Exupéry, recién llegado a Buenos Aires y allí escribió su obra "Vuelo Nocturno", en ese tiempo de cielos contemplados desde la Galería Güemes.
Con el correr del tiempo, su imagen se fue deteriorando y por eso, desde el mes de mayo de 2005 comenzaron las obras de restauración, a cargo del arquitecto Reinaldo Alfredo Lemos.
Dichas obras cuyo costo de recuperación y restauración, ascienden a una suma de $ 800.000, comprenden la limpieza de mármoles italianos y otras piedras que ornamentan el pasaje, ennegrecidos por manos de barniz, y la reconstrucción de una de las dos grandes cúpulas de herrería y vidrio que permitían la iluminación y la ventilación naturales.
También se restauraron relieves que adornan el techo abovedado de la galería y se hicieron copias para cinco faltantes; pero otros ocho ornamentos ovoesféricos extraviados, se dedujeron a partir de fotografías.
El cielo raso de la galería se iluminará artificialmente y, aunque todavía no está en los planes, podría recuperarse el mirador del coronamiento del edificio (a 87 m de altura), que fue el más alto hasta que el Edificio Barolo lo superó por dos metros.
Texto; Susana Espósito - foto: Luis Leoz
