Recuperación del Tigre Club

El lugar se convirtió rápidamente en el centro social, turístico y recreativo más destacado del país. Se reunían allí las principales familias, que llegaban en lanchas por el río Luján. Frecuentaron el Club desde el presidente Julio A. Roca hasta el poeta Rubén Darío, que escribió allí su poema Divagaciones.

A partir de su apertura en 1913, el casino funcionaba cuatro días por semana entre diciembre y marzo. Con el vecino Tigre Hotel, destruido por un incendio en 1940, fue el centro de las salidas veraniegas de las primeras décadas del siglo XX.

Construido en 1910, el Tigre Club fue proyectado y dirigido por el arquitecto francés Pablo Pater y el ingeniero Emilio Mitre. Con acceso principal sobre Paseo Victorica 972.

Desde 1978 es propiedad municipal y fue declarado monumento histórico nacional en 1979.

La idea inicial era recuperar el edificio como centro cultural, pero luego se resolvió que en el mes de septiembre próximo, cuando concluyan las obras, se inaugurará allí un Museo de Bellas Artes, dedicado a la pintura rioplatense.

El emprendimiento está cargo del subsecretario de Obras Públicas de Tigre, arquitecto Guillermo Zwanck

El edificio de arquitectura academicista, construido con materiales nobles y detalles de lujo, llegó a estar en estado de ruinas, por lo cual, se encaró la tarea de recuperación con rigor técnico e histórico y un trabajo artesanal a cargo de especialistas, que comenzaron consolidando su estructura y restaurando revoques, columnas, filtraciones, el retiro y posterior pulido de100 mil baldosas de mármol de carrara blanco que se colocaron nuevamente después de restaurar la losa de la terraza, la reparación de los pisos de roble de Eslabonia en los salones interiores y la recuperación de la araña central, de cristal de roca.

Mediante un convenio con Edenor, se obtuvo un estudio lumínico realizado por los técnicos franceses que iluminaron la Torre Eiffel, que contempla una iluminación diferenciada para días comunes y festivos.

Susana Espósito