Buenos Aires al ritmo del mundial
Sabida es la pasión que sentimos los porteños por el fútbol y ni hablar cuando se trata de un campeonato mundial donde participa la Selección Nacional, a la hora del partido se para el país, no trabaja nadie y las calles están desiertas, pero al finalizar el encuentro... si Argentina gana, la gente descarga toda su alegría en las calles y muy especialmente en ciertos puntos de la ciudad, que ya son clásicos para el festejo.
Argentina pasa a los cuartos de final
El sábado 24 de junio se disputó el encuentro entre el seleccionado argentino y el de México en el Zentralstadion de Leipzig ante unos 45.000 espectadores, por los octavos de final del Mundial de Alemania 2006.
Un partido que sufrimos todos los argentinos, cuando a los 5 minutos del primer tiempo, Márquez marca el primer gol y pone en ventaja a México.
A los 9 minutos, el mexicano Borgetti convierte un gol en contra, aunque Crespo lo festejó como propio, colocando el marcador 1 a 1.
El empate se mantuvo hasta el final del partido y en el tiempo suplementario se produjo el gol tan esperado, Maxi Rodríguez convierte el segundo gol para Argentina, con un tiro espectacular de afuera del área, luego de un pase de Sorín.
La prensa mundial coincidió en que el partido fue muy parejo y destacaron el golazo de Maxi Rodríguez, que vale por un pase a los cuartos de final, donde el seleccionado nacional deberá medirse con el local, Alemania.
El DT argentino, José Pekerman, señaló que la Argentina sufrió mucho las pelotas detenidas, pero resaltó el esfuerzo del plantel.
Finalizado el partido, los jugadores festejaron en el campo de juego, cantando con la hinchada que fue a alentarlos.
Mientras tanto, aquí, en Buenos Aires, comenzaron las bocinas, las cornetas y los festejos en el obelisco, donde se juntó una multitud, mientras en un local temático de fútbol, en el barrio de Recoleta, la celeste y blanca estaba presente en camisetas, banderas, gorros y bufandas. Hubo gran algarabía y no solo festejaron los jóvenes y los mayores, sino que los más pequeñitos, aún sin entender lo que ocurría, vestían su camisetita con los colores argentinos y como si fuera poco... hasta los perros participaron del festejo.
Vamos Argentina!!!!!! y que se repita con Alemania
Texto y fotos: Susana Espósito
