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La mutación de los Palacios porteños

Con el correr del tiempo fueron cambiando las costumbres y esos palacios porteños, donde ya no viven sus dueños originales, guardan el recuerdo de aquel pasado de esplendor económico y glamour, y la gran mayoría están actualmente ocupados por embajadas u otras instituciones y en algunos casos, el boom inmobiliario que se produjo en los últimos años, atrajo a inversores que los convirtieron en hoteles de gran categoría. Uno de los ejemplos es el Palacio Duhau, en la elegante avenida Alvear.

Conozca Buenos Aires visitó el citado palacio, hoy ocupado por una importante cadena internacional de hoteles, en el residencial Barrio de Recoleta.

Construido en 1934 por el arquitecto francés León Dourge, fue ocupado originalmente por la familia Duhau. Los jardines ocupan más de la mitad de los 4,400 metros cuadrados de la superficie del terreno.

Actualmente el hotel cuenta con 165 habitaciones, se integra efectivamente a la ciudad combinando su pasado histórico con un diseño innovador y la tecnología más avanzada del mercado. Está conformado por dos edificios: el Palacio, recientemente restaurado, con entrada sobre la Avenida Alvear, y el nuevo edificio sobre la calle Posadas, construido en total armonía con la arquitectura original. Una delicada y elegante galería de arte y amplios jardines privados conectan los dos edificios.

A los jardines se accede a través de sus amplias escalinatas, con sus balaustradas y sus flores, y se extiende hasta la calle Posadas, atravesando un pequeño bosque de ginkgos y rosas que invitan a entrar.

En el lobby del edificio contemporáneo da la bienvenida a los huéspedes el magnífico mural "Imágenes del barrio", de Juan Batlle Planas, acompañado por una escultura de Alberto Bastón Díaz.

Impacta el Salón Baccarat, ubicado en el Piano Nobile del Palacio, a la izquierda de la entrada principal del Hotel y une la sala de La Biblioteca con el Oak Bar. Este amplio y bello salón de techos altos, grandes ventanales originales, antiguas puertas de madera tallada, y magníficos pisos de mármol capturan y transmiten la historia y la reputación de los años dorados del Palacio.

La biblioteca cuenta con una gran variedad de libros argentinos, y mesitas "petit" con laptop disponibles para el uso de los huéspedes.

En el Oak Bar, con capacidad para 28 personas, está la antigua caja fuerte del Palacio, que fue restaurada para salvaguardar una selección del mejor Cognac, Armagnac y puros. Los paneles que recubren las paredes del Oak Bar fueron tallados en el año 1600 en roble europeo, para decorar la habitación de un castillo en Normandía, Francia. Al fallecer el dueño del castillo, su viuda, apremiada por las deudas, decidió vender algunas pertenencias entre las cuales se encontraba la decoración de la majestuosa propiedad. Al enterarse de esto, el Sr. Luis Duhau, partió a Francia en busca de decorados para sus Palacios de Buenos Aires.

También hay dos restaurantes:
El Restaurante Duhau, con capacidad para 56 cubiertos ofrece cocina tradicional con énfasis en productos frescos de estación, elaborados de manera contemporánea y servidos con la excelencia que caracteriza al servicio Hyatt.
El Chef Julien Piguet rinde homenaje a las técnicas francesas tradicionales y las combina con la cocina clásica con un toque de su propio, elegante y distintivo estilo.

El Gioia Restaurante & Terrazas, elegante y de generosas dimensiones, con capacidad para 60 personas y espectaculares vistas del jardín, fue diseñado para armonizar el contraste entre lo contemporáneo y lo clásico del Palacio.
El Chef, Máximo López May ,ofrece en Gioia, una cocina moderna italiana. Allí se puede disfrutar del servicio de desayuno, almuerzos -con un amplio buffet de antipasti-, snacks, té y cena. Los días domingos el restaurante ofrece el tradicional brunch en la terraza.

Además de las confortables habitaciones, con una refinada decoración, están los espacios de uso común: los jardines, restaurantes, la biblioteca, el spa que cuenta con un clima muy particular y una pileta climatizada semi olímpica.

Un hotel que se nutre del pasado y del presente y refleja la verdadera Buenos Aires del siglo XXI. El concepto más importante de Palacio Duhau - Park Hyatt Buenos Aires es la convivencia de un edificio histórico con un edificio contemporáneo, embebido en la historia de su propio carácter y tradiciones, donde se hace presente lo contemporáneo y vanguardista.

Como si fuera poco, también hay una Vinoteca con 400 etiquetas de vinos y un "Cheese Room", donde se pueden degustar los mejores quesos argentinos, acompañados de una selección de frutos secos, panes y mermeladas caseras, jamón Ibérico de bellota "Pata Negra" y jamón nacional curado 14 meses especialmente para el Hotel.

Si desea conocer el interior de lo que alguna vez fue un palacio residencial, acérquese y conózcalo hoy, convertido en un importante hotel, que lo hará sentir en la Buenos Aires de otros tiempos.

Texto: Susana Espósito - Fotos: Luis Leoz
Fecha de publicación 03/02/07