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Hogar para niñas en Recoleta

Esta institución nace de un grupo disidente dentro de la Sociedad de Damas de la Caridad de San Vicente de Paul. Durante la presidencia de la señora Ana Urquiza de Victorica, se solicitó a la Municipalidad la cesión de una manzana de terreno, que le fue otorgada en el Barrio de Saavedra y no fue aceptada por estar muy lejos.

Cuando la Universidad Nacional de Buenos Aires devolvió a la Municipalidad el terreno comprendido entre las calles Azcuénaga, Peña, Larrea y Melo, se lo ofreció a la Sociedad de Damas de la Misericordia y aunque no era una manzana completa lo aceptaron y fueron comprando los terrenos circundantes donde construyeron el Asilo de huérfanas hoy hogar de niñas.

Allí viven 156 niñas de 4 a 13 años, que permanecen en el hogar desde el lunes a las 7 hasta el viernes a las 17 horas. De esa cantidad de chicas, solo 35 son medio pupilas y se retiran a las 16.30. Todas cuentan con asistencia psicológica y además reciben chequeos odontológicos, nutricionales y fonoaudiológicos.

En general, las madres de las niñas trabajan como empleadas domésticas y este hogar significa una ayuda muy importante, ya que pueden ir a trabajar, sabiendo que sus hijas están a buen resguardo

La mayoría de las mamás trabaja como empleada doméstica en la zona, y es una tranquilidad para ellas saber que sus hijas están contenidas y cuidadas

Este hogar cuenta además con una escuela de enseñanza oficial que actualmente es subvencionada por el gobierno porteño. Sólo los sueldos de las maestras están garantizados: el resto de los gastos dependen de la sociedad de beneficencia.

Se cuenta con un plantel de celadoras, profesoras, cocineras y 35 personas que trabajan allí. También una casa de regalos, situada en el barrio, ayuda en el sostén económico.

Además de la educación formal, tienen hockey, aerobics , gimnasia artística, teatro, artesanías y clases de cocina llenan sus tardes.

Todos los miércoles, las niñas son visitadas por sus mamás, para poder brindarles la cuota de amor y mimos que tanto esperan y compartir un momento juntas.

Se tienen muy en cuenta la educación, los hábitos de convivencia y todo lo que les sirva de herramienta para soñar con un futuro mejor, en el que puedan desenvolverse y alcanzar sus objetivos.

La directora es Alejandra Romeo y su mayor deseo es conseguir padrinos para cada uno de los cuartos de las chicas, que necesitan arreglo de los techos, rejas para las ventanas y ventiladores.

Todos aquellos que quieran y puedan colaborar con esta maravillosa obra, pueden hacerlo comunicándose al teléfono 4805-9465, interno 121.

Texto: Susana Espósito
Fecha de publicación 23/11/07