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Navidad para todos

Aunque parece que falta mucho, ya se respira el espíritu de las Fiestas de fin de año y por ello, ya se ve en las vidrieras árboles, adornos, guirnaldas y pesebres. En pocos días más, el 8 de diciembre, será el día de armar el arbolito y en él se depositan ilusiones y la esperanza de una Navidad en paz y armonía familiar como también de un nuevo año mejor.

Sin embargo, hay muchas personas que están solas y otras tantas que no tienen vivienda y son los sin techo, por ello, hay un grupo de voluntarios con el lema “Navidad para Todos”, que sale a repartir panes dulces y mensajes de esperanza a las dos de la madrugada el 25 de diciembre por la ciudad de Buenos Aires, a esas personas.

Esta iniciativa se gestó a partir de un grupo de amigas que sintieron la necesidad de acompañar a aquellos que se encontraban solos, y año tras año repiten la experiencia. Comenzaron siendo 500 voluntarios y en la última edición ya sumaban aproximadamente 3000.

El objetivo no es solo repartir esos productos sino acompañar a la gente sola en la calle, hospitales y también a los conductores de colectivos que trabajan en la Nochebuena.

El lugar de encuentro de los voluntarios es la iglesia San Nicolás de Bari, en la Av. Santa Fe 1352, en el barrio porteño de Recoleta, a las 2 de la mañana. Allí los voluntarios buscan bolsas con panes dulces y cartas navideñas para repartir. Las organizadoras dividen el mapa de la ciudad en 50 zonas. En cada zona marcan los hospitales, plazas, estaciones de bomberos, estaciones de tren, las comisarías y los centros asistenciales de jubilados. A cada voluntario se le adjudica un lugar a donde llevar el pan dulce y palabras de aliento.

A los voluntarios se les asigna una familia específica receptora de la caja con sus respectivos datos: nombres, cantidad de integrantes, sus talles de ropa y otros datos accesorios, como, por ejemplo, de qué equipo de fútbol son. Todas las cajas las acercan unos días antes de Navidad al Centro Costa Salguero de Capital Federal para luego ser enviadas a sus destinos. La cantidad de cajas de diferentes tamaños y colores que se suman en pilas justifica el trabajo de todo el año de las organizadoras.