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Heridos por pirotecnia

Como todos los años, a pesar de las recomendaciones y del antecedente de años anteriores, todavía hay mucha gente que no lo tiene en cuenta y a la hora de utilizar pirotecnia para festejar la Nochebuena, por esa razón han sufrido las consecuencias.

Este año hubo en el país más de 170 personas que resultaron heridas y entre ellas, hay niños con lesiones graves.

Consultados algunos hospitales, se puede saber que en el Hospital de Quemados fueron atendidas 27 personas, de las cuales 18 debieron ser intervenidas durante la madrugada por heridas graves, según informó a los medios, la directora de la Institución, Miriam Miño.

Lo que ella misma pudo ver y hacer notar fue que a diferencia de años anteriores en los que generalmente acudían al hospital con quemaduras de diferentes grados, esta vez se presentaron casos de manos muy traumatizadas, que por ejemplo provocó la ablación del dedo medio de una mano derecha y en otros casos se vieron manos con parte de músculos expuestos. Un niño de 8 años que llegó con quemaduras en el 38 por ciento de su cuerpo, se encontraba en estado crítico. El pequeño presentaba además lesión inhalatoria y fue derivado a la terapia intensiva del hospital Garrahan.

También asistieron al hospital oftalmológico Santa Lucía, diez personas que ingresaron tras sufrir heridas de gravedad y necesitaron cirugía en sus ojos tras los festejos navideños, ocho por uso de pirotecnia y dos por descorches de botella accidental. El jefe de Guardia de ese establecimiento porteño, Fernando Pellegrini, indicó que se atendieron "a 57 pacientes" y reportó que entre los heridos había "cuatro niños" en estado "grave quirúrgico". El médico expresó también que según la estadística de ese hospital, hubo un 20 por ciento más de heridos que el año pasado, con trauma severo en los ojos y confirmó que 9 personas debieron quedar internadas y se realizaron tres cirugías.

Al Hospital Lagleyze, ingresaron unas 26 personas con lesiones oculares, tres de ellas de gravedad y una niña de seis años afectada por el estallido del globo ocular que le compromete seriamente su visión. El jefe de guardia del hospital, doctor Pedro Véntola dijo que en este nosocomio disminuyó la cantidad de pacientes.

Es necesario tomar conciencia de estas estadísticas que cada año demuestran un aumento de heridos por pirotecnia y muchas veces convierten lo que debería ser un festejo, en una tragedia. Que 2012 comience con sonrisas y felicidad y no, con tragedia y lágrimas.