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El vandalismo de todos los días

La semana pasada fueron vandalizadas dos esculturas: la de Gabriela Sabatini, que hace pocos días se había inaugurado en el Paseo de la Gloria, en Costanera Sur y la otra es la escultura de Luis Alberto Spinetta, emplazada en las calles Roosvelt y Triunvirato en el barrio Villa Urquiza.

La agresión hacia algunas esculturas de la ciudad no es ninguna novedad, ocurre muy seguido y restaurarlas o reponer partes que les arrancan también tiene un costo importante.

En esta oportunidad, le arrancaron la raqueta a Gabriela y al flaco Spinetta le robaron los lentes (vecinos de Villa Urquiza dicen que es la cuarta vez que vandalizan esta escultura).

Fuentes del Gobierno de la ciudad reconocen que los lentes desaparecieron cuatro veces, a pesar de que la escultura queda resguardada todas las noches dentro del bar, cuyos propietarios tienen las llaves para abrir y cerrar el cofre donde está la estatua.

Según fuentes del gobierno porteño, reponer la raqueta en la escultura de la tenista costará $ 12.000.

Estas esculturas homenajean a figuras emblemáticas porteñas, ya sea de la historieta, cómicos y ahora deportistas destacados. Algunos viven e incluso han asistido a inaugurar su propia escultura, en ese homenaje que les rinde la ciudad y otros han fallecido pero la escultura mantiene vivo su recuerdo.

Susana Espósito - Noticia publicada el: Lunes 03/11/14 - (Cantidad de caracteres: 1337)