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El saneamiento del Riachuelo

El Riachuelo es, desde hace varias décadas, motivo de preocupación, por el grado de contaminación que viene de larga data y la imperiosa necesidad de un saneamiento que está en marcha.

Otro de los problemas que ha debido enfrentar el Gobierno de la ciudad es la relocalización de los habitantes de las villas. La gente se fue instalando en casillas de madera sobre las montañas de basura acumuladas con los años y se ha comprobado que la contaminación del riachuelo también incidió en su salud.

Afortunadamente, ya no se ven esas montañas de basura y de 1.836 familias, ya fueron mudadas 412, de los asentamientos El Pueblito, Magaldi y Luján, que ya no existen. “La idea es que para el año que viene quede liberado todo el camino de sirga salvo una parte de la villa 21.24”, explicó Silvia Lospennato, representante del Gobierno porteño en la Autoridad de Cuenca Matanza-Riachuelo (Acumar), el organismo conformado por Nación, Ciudad y Provincia, para cumplir con el fallo de la Corte.

Es 2010 comenzaron a recolectar la basura de la costa. Un servicio de recolección de residuos se hace con lanchas, porque hay muchos lugares de la ribera que no permiten el acceso a pie.

Más allá de la gran cantidad de residuos de todo tipo, que se acumulaba cerca de la orilla, también se retiraron 64 barcos hundidos y posteriormente, empezaron a aparecer coches (se sacaron unos 50) que habrían sido arrojados desde la villa 21-24, donde fue desbaratado un desarmadero.

La mayoría eran coches robados, desarmados y tirados desde una barranca en la villa 21.24. Gran parte de las carrocerías fueron levantadas hace años, pero cada tanto aparece una sorpresa: semanas atrás encontraron un taxi.

El otro tema central para sanear el Riachuelo es controlar los vuelcos de sustancias tóxicas que hacen las empresas. Para encontrar esas conexiones ilegales, el Gobierno porteño tiene un pequeño robot que recorre y filma los desagües pluviales. La tercera pata del plan es que ya no se vuelquen al río los desechos cloacales. Esto se logrará una vez que la empresa AySA concrete un plan de obras sanitarias que viene demorado.

Lo cierto es que quienes visitamos ahora el barrio de la Boca, nos damos cuenta que no se percibe el olor desagradable de otros tiempos y el agua del Riachuelo luce limpia, incluso algunas tortugas se dan el gusto de nadar por allí.

Susana Espósito - Noticia publicada el: Viernes 22/08/14 - (Cantidad de caracteres: 2364)