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El gobierno porteño contrató al subte de París con la idea de mejorar el servicio en nuestra ciudad. La empresa francesa elaborará un informe con propuestas para optimizar el uso de la infraestructura existente y colaborará en la redacción del pliego de licitación de la línea F.
“La ciudad luz” está cruzada por 215 kilómetros de vías, 14 líneas de subterráneos y 384 estaciones (una de ellas lleva como nombre Argentina).
Régie Autonome des Transports Parisiens (RATP), fue contratado por el gobierno porteño para realizar un diagnóstico integral sobre la explotación de la red porteña de subterráneos y elaborar los pliegos de condiciones para la licitación de la futura línea F, proyectada para unir Constitución con Plaza Italia.
De esta manera, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, contará con una nueva evaluación a fines de este mes, según anticipó Natacha Ferrier, directora de Relaciones Internacionales de RATP.
Ya hubo otra evaluación que había realizado Barcelona, relacionada con el estado general de la red.
Asimismo se decidió avanzar en el diseño de la línea F, antes que otras trazas también definidas por ley, porque será otra línea transversal entre el norte y el sur de la ciudad, que sumará 500.000 pasajeros al millón de usuarios que hoy transporta la red por día. Igualmente, relativizaron que la línea pueda funcionar de manera automática: "Se recibirán propuestas que luego se verá si pueden ser aplicadas al subte porteño", explicaron las fuentes.
Un tercer contrato une al grupo francés con la Argentina: lidera el proyecto de mejora integral del ferrocarril Roca, ramal Plaza Constitución-La Plata. En este caso, el socio es el gobierno nacional.
Para RATP son las primeras negociaciones del transporte en la Argentina, pero no las primeras en América del Sur: en Brasil opera la línea 4 del metro de San Pablo y en Santiago de Chile firmó un contrato de señalización en el metro de esa ciudad con una duración de 18 meses. Si Macri se convenciera de convertir a la F en la primera línea automatizada del país, RATP podría ir mucho más allá gracias a su know-how: en 1998 inició la automatización total en el metro de París con la puesta en marcha de la línea 14; en 2011 hizo la primera transición de una línea operada por humanos a otra automática, y ya prevé el mismo proceso en otra: la 4, una de las más sobrecargadas de París.
Esta novedad, en principio generó desconfianza y temor en los parisinos, pero luego se dieron cuenta que la automatización brinda mayor seguridad en la operación y aumento de la frecuencia de los trenes, cuyo intervalo se reduce de dos minutos en las líneas normales a 85 segundos en las automatizadas.
Claro que el excelente funcionamiento de los subtes parisinos tiene su precio, la tarifa es 1,90 euros por viaje, es decir, $ 21,50. No obstante, muy pocos pagan ese precio: el 80% de los parisinos contrata abonos anuales con fuertes descuentos y un costo aproximado de 500 euros, que en el caso de los trabajadores en relación de dependencia es reembolsado en un 50% por el empleador.
Lo pagarían los porteños? Recordemos que se armó un gran revuelo cuando se anunció que el boleto aumentaría a $4,50.
Susana Espósito - Noticia publicada el: 17/04/14 - (Cantidad de caracteres: 3196)
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