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Deuda moral con los héroes de Malvinas

El miércoles 2 de abril se cumplieron 32 años de la Guerra de Malvinas y es el Día del Veterano y los Caídos en esa guerra, por eso, se realizaron varios actos en todo el país.

En la ciudad de Buenos Aires se dio una misa en la Catedral Metropolitana, presidida por el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Aurelio Poli, en memoria de los caídos en Malvinas.

En la Casa Rosada, la presidente, Cristina Fernández, descubrió una de las siete banderas que flamearon en las islas durante el Operativo Cóndor, en 1966 y también bautizó uno de los espacios interiores de la Rosada, con el nombre de Patio Malvinas y presentó el nuevo billete de $ 50 que rinde también homenaje a las Malvinas. Sin embargo, hace falta algo mucho más importante que eso, asomarse al balcón y darse cuenta que frente a sus ojos descubrirá a un grupo de hombres que desde hace seis años están acampando allí, para reclamar su inclusión en la ley vigente para veteranos de guerra, que por una modificación del año 1998, quedaron excluidos del reconocimiento.

Eran chicos de 18 años, que no eligieron, los obligaron a ir a defender nuestra soberanía, sin ningún tipo de adiestramiento militar y allí fueron, a enfrentar el horror de una guerra, de matar o morir, de ver caer a sus compañeros, de pasar frío, extrañar a sus familias y el calor de sus hogares y luego, cuando todo terminó, lejos de haber sido recibidos con los laureles de la gloria, recibieron indiferencia y olvido, POR LO MENOS DE LAS AUTORIDADES, porque gran parte de nuestra sociedad los tiene presentes y les estamos agradecidos, los apoyamos en su lucha totalmente pasiva, sin agresiones, sin cortes de calles, sin palos ni máscaras, reclamando lo que es justo aunque todavía no pudieron lograrlo.

Nos hemos acercado para hablar con ellos y presentarles nuestro respeto en este nuevo aniversario, ingresamos a la carpa y hablamos con Darío Vergara (soldado conscripto-clase 63-Chaco-Grupo Artillería 7) y con René Rojas (clase 62 del mismo grupo).

Junto a ellos había dos turistas españolas que también llegaron al lugar, interesadas por saber cuál era su reclamo. Informaron acerca del tema y además contaron con dolor sobre las 17 cruces blancas, en un cantero de la plaza, que simboliza a los 17 compañeros muertos en la zona del litoral marítimo patagónico, en escaramusas con comandos ingleses, que fueron reconocidos como héroes de guerra muertos en combate, al caer un helicóptero derribado y "nosotros, los que quedamos vivos no hemos sido reconocidos, habiendo estado en el mismo lugar, junto a ellos".

"Solo la línea fundadora de de Madres de Plaza de Mayo nos apoyaron siempre, pero Hebe Bonafini siempre nos atacó y nos trató de `milicos de mierda`", relataron los veteranos, a lo que ellos contestaron que fueron tan víctimas como sus hijos porque ellos fueron obligados a la guerra, los montoneros no fueron obligados, fueron porque quisieron y sin embargo fueron reconocidos, los presos de la dictadura cobran una pensión de $ 6.000. "A mi me cargaron en un avión un día a la madrugada y me llevaron, con 18 años, nos dieron un fusil que ni siquiera sabíamos armarlo ni desarmarlo"-dijo Vergara-.

También destacó que “Hay también pensiones truchas, no quieren depurar el padrón. Hay alrededor de 10 mil pensiones truchas y nosotros somos 8 mil. La pensión honorífica nacional, equivale a tres pensiones normales. También cada provincia le otorga a sus soldados, otra pensión que varía de acuerdo al presupuesto de esas provincias”.

El reconocimiento, ahora depende exclusivamente de la decisión de la presidente.

Eduardo José Ochoa (4a Brigada aerotransportada-Regimiento 14 de la provincia de Córdoba) quien estaba allí, nos dijo: “Los veteranos de guerra sufren un psico trauma generado por estos 32 años durante los que han sido abandonados, ignorados, olvidados por una parte de la sociedad, sobre todo la política, que es la más importante, la que tiene que legislar y ver las situaciones emergentes a una condición social. En este campamento emblemático, en una plaza histórica como lo es la Plaza de Mayo. Este acampe tiene una característica, seis años de lucha y permanencia y se eligió un arma que tiene que ver con el honor, la gentileza, el ser solidario con nuestro país, entonces nuestro reclamo es pacífico, ni cortes, ni escraches políticos, simplemente reivindicando la situación Malvinas Argentinas y pidiendo a gritos que apliquen las leyes vigentes para los veteranos de guerra, sin un decreto que obstruye la aplicación constitucional sobre ellas y es por eso que seguimos acá, diciendo una verdad histórica: Teníamos 18 años y fuimos por ley, obligados a defender nuestra Patria, que con honor y con gusto lo hemos hecho, pero hace 32 años que nuestro Estado, padre de la Patria no nos reconoce como hijos tales, argentinos”.

Continúa Ochoa “Hay una situación real de la que uno no puede escapar ni ponerse a contar la historia que no le pertenece, nosotros contamos la historia que nos pertenece, desde el ámbito que nos tocó cumplir con las órdenes del conflicto, o sea, no es que acá viene cualquiera a reclamar cualquier cosa. En el período del conflicto del Atlántico Sur, mal llamado guerra de Malvinas, porque no fue una guerra declarada, se crean por decretos, como el 700, de la creación del teatro de operaciones TOAS, un espacio físico, donde se juntaba la tropa y desde ahí se destinaba a los lugares donde eran requeridos durante el conflicto, ya sea en el mar, en el aire, en las islas Malvinas, en las Georgias, en las Orcadas, Isla Grande de Tierra del Fuego o en cualquier parte del litoral patagónico argentino desde el paralelo 42 al sur, donde estaba emplazado ese teatro de operaciones. Allí se dirimía la estrategia militar a cumplir y en base al requerimiento bélico éramos enviados a esos lugares. Bajo las órdenes del TOAS, nuestros compañeros, nuestras propias unidades desdobladas, algunas iban a un lugar u otro y otros quedaban en el teatro de operaciones. Lo más curioso es que por ley y por decretos, reconocieron a los vivos y a los muertos de las islas, a los del mar (sin haber pisado las islas), a los vivos y a los muertos del aire (sin haber pisado las islas) y a los muertos del continente. Nosotros, los que quedamos vivos, jamás tuvimos ni siquiera las gracias del Estado y tenemos 17 compañeros muertos en acciones bélicas, ya sea que cumpliendo las órdenes de defensa y vigilancia hayan muerto por accidente, como hubo en Malvinas, son todos veteranos de guerra”.

Ochoa continúa con su relato explicando “En estas condiciones estamos hoy, tenemos una comisión directiva con su presidente, vicepresidente, vocales y secretarios que se encargan de gestionar y ahora, después de seis años y con toda la documentación presentada, este campamento, ha logrado mínimamente tener una mesa de diálogo con este gobierno, que durante mucho tiempo nos ha tenido acá. Aquí en esta Plaza se han realizado actos donde flameaban banderas de inclusión y verdad a los derechos humanos y nosotros permanecemos acá, con el apoyo de todos los foros de derechos humanos, como la PDH, el INADI, Pérez Esquivel que ha estado acá con nosotros; también apoya la ARAC de Francia, que es la asociación de veteranos más antigua del mundo que trabaja desde La Haya y desde la ONU para apoyar o desacreditar los reclamos internacionales relacionados con el derecho internacional del combatiente y han dictaminado que el Estado Nacional tiene que obedecer las leyes argentinas e incluirnos en las leyes vigentes para ser reconocidos como veteranos de guerra del conflicto del Atlántico sur, porque allí estuvimos”.

También preguntamos si Bergoglio les brindó su apoyo y respondió: "desayunó en más de una oportunidad con los ex combatientes, traía sus facturas, tomaba mate con ellos y se ha manifestado en el gobierno sobre la posibilidad de que haya menos exclusión en nuestro país y estos acampes en la Plaza, en plena democracia, pidiendo inclusión social, respeto y valorización de los derechos humanos a un gobierno que enarbola esa bandera... También ahora, como Papa, ha intercedido para que al menos seamos escuchados" destacó Ochoa.

El ex combatiente enfatizó "Hoy es una decisión política y yo creo que hay por parte de nuestros políticos un desconocimiento total sobre la causa Malvinas y seguramente faltará instruirse para poder determinar bien cuál es la situación. Nosotros hemos sido respetuosos de las leyes nacionales y de la totalidad de la sociedad, haciendo un reclamo pacífico, durante el cual también han fallecido 9 compañeros, que han partido sin su identidad patriótica, sin llevarse el honor de ser hijo de nuestro Estado Nacional, porque lo defendimos con nuestras vidas".

"También sería interesante que se salieran a contar la verdad de ese conflicto, porque hubo gente que exageró la historia y otros que la manipularon. Años atrás, el Estado se encargó de reconocer a 649 muertos en Malvinas y es una gran mentira, porque más de la mitad murieron fuera de Malvinas, 323 en el ARA Gral. Belgrano, 50 pilotos, 17 en el continente. Cuando se hace la declaración abierta del conflicto, porque los ingleses entraban por la Bahía San Carlos (el 4 de mayo), ya había 10 muertos del Liceo Gral. Roca, los del Gral Belgrano (en la madrugada del 1° de mayo), antes de la fecha que es ícono del conflicto en Malvinas, ya habían muerto la mitad de ese número fuera de Malvinas. Por eso sería bueno que se abra el informe Rattenbach, específicamente para que la sociedad tenga conocimiento del conflicto que tuvo que vivir nuestro país".

"En 1983, durante el gobierno de Alfonsín, se decretó mediante el Ministerio de Defensa, que en los libros de instrucción para la primaria se incluyeran solo diez renglones que hablaran de la gesta de Malvinas. Con eso no alcanza ni siquiera la biografía del soldado Oscar Ismael Poltronieri, que fue el único condecorado a nivel nacional con la Cruz de hierro al valor en combate y después de él, nadie más puede decir que es un súper héroe, porque combatió solo contra los ingleses para salvar la vida de sus compañeros", destacó Ochoa.

Cuando pregunté si tenía la esperanza de lograr el reconocimiento antes de que Cristina finalice el mandato, respondió que "si bien uno va perdiendo credibilidad, tengo esperanza como argentino, los políticos no hacen las cosas del todo bien ni del todo mal, este gobierno, seguramente tendrá muchas cosas que mejorar y entre ellas, abrir la causa Malvinas, hacer un estudio profundo y cerrar este tema de una vez por todas, como corresponde, como dice la ley y la historia de cada uno de los miembros de este campamento".

Algo que nos impactó fue saber que en el Padrón de Veteranos de Guerra, puede leerse un listado de civiles que en representación política de todos los partidos de aquella época, hace 32 años, viajaron a Malvinas para el meeting que se le hacía a Menéndez cuando ascendió como gobernador. Según nos comentó Ochoa, “entre los que fueron: Moria Casán, Noemí Alan, Yuyito González, Jorge Lupiano secretario del diputado Mercuri, que tiene actualmente unos 45 años, o sea que no le da la edad para haber estado en combate en Malvinas, Hugo Moyano (que figura como combatiente con domicilio en Mar del Plata) y están cobrando las pensiones honoríficas que se les niega a quienes están en el campamento de Plaza de Mayo”. Sin palabras...

Finalmente, también hablamos con Julio César Creativo, que estaba terminando de emplazar una escultura que realizó en cemento directo, patinada en bronce, que representa a un Soldado caído en Malvinas. Es la tercera escultura con esta temática que realizó el artista. Está ubicada junto a las 17 cruces que recuerdan a compañeros caídos y se inauguró el 1° de marzo a la noche, durante la vigilia de este nuevo aniversario de la Guerra del Atlántico Sur.

Todo nuestro respeto y reconocimiento para esos soldados que con tanta valentía han luchado por la soberanía de Malvinas, algunos perdiendo su vida y otros en esta lucha permanente por ese reconocimiento que tanto tarda en llegar.

Susana Espósito - Noticia publicada el: 03/04/14 - (Cantidad de caracteres: 12081)