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Propinas, ¿si o no?

Hace pocos días, el diario La Nación publicó una nota en la que dice que los norteamericanos se están cuestionando el uso de la propina e incluso en algunos restaurantes ya comenzaron a prohibirlas.

Quienes han viajado, saben que tanto en Estados Unidos como en algunos países europeos, en muchos restaurantes está incluida la propina en la adición. Habitualmente se recarga entre un 15 y un 20%. Lo mismo ocurre con los taxis.

Muchas veces me he preguntado si cuando vamos a la farmacia, la panadería, el médico, etc. les dejamos propina por su atención y lógicamente no es así, entonces, por qué debemos dejar propina a los camareros si ya tienen su sueldo y lo cobran por hacer lo que corresponde, como cualquier otro trabajador?

Es más, eso de incluir la propina, obligando al cliente que tal vez considere que quien lo atendió no lo merece o simplemente cree excesivo el porcentaje que se recarga, por qué debe aceptarlo? A esto puedo agregar que al ser la propina obligatoria, el camarero ya sabe que eso lo tiene asegurado y así, le quita el incentivo de hacer las cosas bien, como corresponde. Para qué esmerarse si total le dejarán igual su propina.

En cierta forma, es una avivada de los dueños de restaurantes que pagan sueldos bajos, justificando que sus locales funcionan bien, tienen buena clientela y con las propinas, los mozos duplicarán sus sueldos.

La propina es un premio que el comensal deja (si así lo desea) a quien lo ha atendido bien, pero ¿por qué dejarla cuándo algunas veces la atención fue mala?

Esta cuestión, en Estados Unidos, ha llevado a la conclusión de que hay que garantizar salarios mejores y más igualitarios, refiriéndose en ese sentido al personal de cocina y los lavaplatos, que al no estar en contacto con el cliente, no tienen la misma oportunidad de recibir una gratificación como los camareros. Aumentar los sueldos sería una buena medida y así podría eliminarse la obligación de dejar la propina.

Vale destacar que el significado de esta palabra es “Cantidad de dinero que se da voluntariamente para agradecer un servicio”, si es obligatoria y con un porcentaje predeterminado, se la puede considerar un impuesto aplicado al consumo que estamos realizando.

Susana Espósito - Noticia publicada el: Martes 20/10/15 - (Cantidad de caracteres: 2218)