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Preocupa el aumento de
abusos sexuales en la Iglesia

De acuerdo a publicaciones en diferentes medios, en los últimos años, los casos de pedofilia en la Iglesia han crecido exponencialmente y el celibato es tema de discusión.

En todo el mundo han surgido denuncias al respecto y es así que por ejemplo, en Irlanda son más de 3.500 niños abusados, más de 1.000 en Pensilvania, cientos de niños en Chile y 63 en Argentina. En mayor o menor medida, la aberración se repite en cada punto de la Tierra y tal vez el número sea más elevado, difícil de conocer, porque muchos no denuncian por miedo o vergüenza y también porque la Iglesia se ha ocupado de ocultarlo.

Este tema genera un debate difícil de dilucidar, porque es difícil determinar cuál es la raíz del problema. Una de ellas es el ejercicio del abuso de poder como un paso previo al abuso sexual y otra, hoy discutida en el seno mismo de la Iglesia, es el celibato.

El Papa Francisco opina "Que el celibato traiga como consecuencia la pedofilia está descartado. Más del 70% de los casos de pedofilia se da en el entorno familiar y vecinal: abuelos, tíos, padrastros, vecinos. El problema no está vinculado con el celibato. Si un cura es pedófilo, lo es antes de ser cura".

Sin embargo, son muchos los sacerdotes que consideran que es un tema que debería ser tratado. Por ejemplo, el Obispo de San Francisco, en Córdoba, Sergio Buenanueva expresó: “El celibato en sí mismo no es causa de que un adulto se convierta en un depredador sexual, pero sí es un importante factor de riesgo. Especialmente para personas que, por alguna situación de inmadurez personal, no debieran abrazar la vida célibe. Porque la vivencia de la sexualidad en el celibato tiene una complejidad y complicación que no tiene la vida de una persona que vive normalmente las relaciones sexuales". También Fortunato Mallimaci, Profesor de la Universidad de Buenos Aires e investigador del Conicet; lidera el programa Sociedad, Cultura y Religión y ha expresado su opinión: "Creo que el celibato es un factor importantísimo. En el siglo XXI, la sexualidad, los deseos, forman parte de la vida cotidiana de cualquier institución. Entonces, que se sigan manteniendo criterios de siglos anteriores respecto de los cuales se obliga a aquellos que llegan a ser sacerdotes es algo que hay que comenzar a discutirlo y rápidamente".

Son muchas las opiniones sobre un tema que merece ser tratado con urgencia para prevenir y evitar que siguen sumándose casos. Vale la pena recordar que: Pedro, el primer Papa, y los apóstoles escogidos por Jesús eran en su gran mayoría hombres casados.

En el año 1045, el Papa Bonifacio IX se dispensó a sí mismo del celibato y renunció al papado para poder casarse.

Sin embargo, en el año 1074, el Papa Gregorio VII dice que toda persona que desea ser ordenada debe hacer primero un voto de celibato: "Los sacerdotes [deben] primero escapar de las garras de sus esposas".

En el año 1095, el Papa Urbano II hizo vender a las esposas de los sacerdotes como esclavas y sus hijos fueron abandonados.

Finalmente, en el año 1123, el Papa Calixto II en el Concilio de Letrán I decretó que los matrimonios clericales no eran válidos y por ello, La ley del celibato fue promulgada por la iglesia latina primero de forma implícita en ese primer concilio y más tarde explícitamente en los cánones 6 y 7 del segundo concilio de Letrán 1139 bajo el Papa Alejandro II.

"El celibato no es esencial para el sacerdocio; no es una ley promulgada por Jesucristo." Declaración del Papa Juan Pablo II en julio de 1993.

Esta es parte de la historia sobre cómo surgió el celibato y también demuestra que tal vez fue un error imponerlo porque incluso, aquellos que lo impusieron, no lo cumplieron. Es fácil comprobar que tanto en los libros de Historia como en series televisivas se muestra claramente que sacerdotes, obispos e incluso Papas, tenían sus amantes e incluso participaban en orgías y además, sería interesante saber por qué tampoco se habla de la Papisa Juana, que existió, debió disfrazarse de hombre para poder estudiar Teología y llegó a convertirse en el Papa Juan VIII. Interesante Historia que muchos consideran leyenda, pero todo indicaría que fue real.

¿Por qué no puede un hombre casarse y además, servir a Dios? No es garantía para que no sea un pedófilo, pero tal vez influiría favorablemente al no tener que reprimir su deseo sexual, una necesidad inherente a la raza humana, pudiendo satisfacerlo con su esposa u otra mujer, como cualquier otro hombre.

Susana Espósito - Noticia publicada el: Viernes 07/06/19 - (Cantidad de caracteres: 4488)