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El tractorazo del sábado y el mensaje al gobierno

El sábado 23 de abril, al mediodía, los productores rurales se concentraron en Udaondo y Libertador para ir hasta la Casa Rosada a manifestar pacíficamente su rechazo a la presión impositiva y la intervención en los mercados.

Los ruralistas autoconvocados llegaron en tractores y camionetas, partieron desde el citado punto de encuentro hacia Plaza de Mayo, donde se organizó un acto frente a la Casa Rosada a las 15 horas.

El reclamo fue impulsado por productores autoconvocados del norte bonaerense, sur de Santa Fe y de Córdoba, cuenta con la adhesión de cientos de sociedades y asociaciones rurales de todo el país, pero no de las cuatro entidades nacionales que conforman la Mesa de Enlace: Sociedad Rural Argentina (CRA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Federación Agraria Argentina y Coninagro. Es en rechazo a la presión impositiva y a la intervención del Gobierno en los mercados de granos y carne, entre otros puntos, según los ruralistas.

Un ganadero del Impenetrable fue el primer productor en llegar a Buenos Aires para el tractorazo del campo. El chaqueño, Vito Reigenborn, viajó 1.400 kilómetros en un viejo Zetor 25 de la década del '50 y fue el primer tractor en llegar a Costanera Norte.

"Es hora de que los productores nos pongamos al frente porque esto ya no es llevadero: o bajamos los brazos y nos quedamos mirando qué pasa o salimos a protestar para hacernos escuchar", manifestó Reigenborn.

Varios dirigentes apoyaron el reclamo y se sumaron mismo en la caravana y luego en Plaza de Mayo, entre ellos podemos citar a Patricia Bullrich, Diego Santilli, Horacio Rodriguez Larreta, Jorge Macri, José Luis Espert, Ricardo López Murphy y Graciela Ocaña, entre otros.

Poco a poco la Plaza de Mayo se fue llenando de gente que autoconvocada se acercó a dar su apoyo al campo ingresando por Avenida Diagonal Norte, Paseo Colón y las calles aledañas, con banderas argentinas, la Constitución y pancartas reclamando al gobierno "que no les dé una mano, que les quite las dos de encima", basta de impuestos, basta de retenciones, respeto por la Constitución y también un fuerte repudio hacia el accionar del gobierno y fundamentalmente hacia la vicepresidente, Cristina Fernández de Kirchner. No hubo un acto central ni oradores asignados, simplemente, se leyó un petitorio.

Los productores agropecuarios se mostraron muy satisfechos por el cálido recibimiento y el apoyo de la ciudad al campo y finalizado el encuentro, los manifestantes se fueron desconcentrando, civilizadamente, sin dejar pintadas ni suciedades que después hay que limpiar y generan un importante costo para la ciudad, como suele ocurrir con cada piquete y acampe, donde hay suciedad, destrozos y generalmente los padecemos en días laborables, cuando no nos permiten transitar libremente para llegar a nuestros lugares de trabajo.

Es hora que el gobierno entienda que el campo es el motor del país, el que alguna vez nos convirtió en el "granero del mundo" y es el campo el que da de comer a la ciudad. Es fundamental no poner la soga al cuello al que invierte y trabaja para que ese país que prometieron poner de pie, pueda hacerlo y no termine acostado y hundido en una ciénaga.

Susana Espósito - Noticia publicada el: Lunes 25/04/22 - (Cantidad de caracteres: 3217)