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En el país de la abundancia hay gente que come basura

Argentina es un inmenso país con una madre tierra generosa que nos permite producir todo tipo de cultivo y criar todo tipo de animales, por lo tanto, resulta increíble pensar que alguien pueda morir de hambre y sin embargo, eso ocurre.

Es inexplicable que aquel granero del mundo que proveyó a otros países todo tipo de cereales y carnes, ganándose el prestigio de contar con las mejores del mundo, hoy se convirtió en un país devastado por sus malos gobernantes, generadores de pobreza, donde muchos mueren de hambre y otros comen de los contenedores de basura y desperdicios de los basurales para poder subsistir.

Abundan los cartoneros y personas que tocan timbres, todos los días y varias veces por día, pidiendo ropa. Cada vez hay más gente durmiendo en la calle y es la consecuencia de los malos gobiernos que nos arrebataron, saquearon a nuestro país, dejándolo inmerso en una crisis de la cual será casi imposible salir.

Ahora, el actual gobierno parece tener la mejor intención de ponerlo de pie, pero no se da cuenta que la mayoría está de rodillas y lejos de amagar a levantarse, está a punto de quedar acostado, dejándose caer vencidos porque ya no les dan las fuerzas para intentar pararse.

Por otro lado, los jubilados, esos que aportaron tantos años y ahora no reciben la jubilación que les corresponde, no llegan ni a mitad del mes, comen cuando pueden, no les alcanza para los medicamentos y también están los otros jubilados, que cobran lo mismo sin haber trabajado nunca y por ende, nunca hicieron aportes, pero perciben haberes como quienes sí trabajaron. ¿Qué les pasa a los gobernantes que siempre meten mano en las cajas de jubilaciones para cubrir otras deudas, para pagar subsidios y asignaciones a quienes lo único que hacen es salir a manifestar, a cortar calles, a quemar contenedores y romper veredas? ¿Por qué el hilo se corta siempre por el lado más fino, el de los jubilados que no salen a cortar calles no salen a apedrear a nadie? ¿Cuándo comenzarán a ajustar las dietas de los legisladores, funcionarios, los jueces y obligar a que todos paguen impuestos. ¿Cuándo Dios y la Patria les demandará a quienes nos mintieron y traicionaron, el no haber cumplido con su juramento?

Otro gran error que suelen cometer muchos opinólogos de programas televisivos es decir que "la gente roba por ser pobre", porque tienen hambre. GRAN MENTIRA, No señores, el pobre tiene dignidad, sale a trabajar para poder llevar un plato de comida a su mesa.

Desgraciadamente, hay muchos argentinos que se asemejan a las "aves de pico encorvado" que cita el Martín Fierro: “Ave de pico encorvado,/le tiene al robo afición;/pero el hombre de razón/no roba jamás un cobre,/pues no es vergüenza ser pobre/ y es vergüenza ser ladrón”.

No podemos obviar a extranjeros que habitan nuestro suelo argentino e hicieron caso omiso a nuestro preámbulo de la Constitución, que habla de todos los que quieran habitar el suelo argentino. Señores, a no morder la mano de quien les da de comer, vivan en Argentina pero con honradez, trabajando y no robando. Tenemos un país generoso que les abrió sus puertas como ningún otro.

En estos últimos días se dieron a conocer casos de gente que se acerca a los basurales a revolver para ver qué pueden llevarse, lo mismo ocurre en el Mercado Central, donde se descartan frutas y verduras que varias familias recogen y llevan para comer y en la ciudad, abundan cartoneros y gente que saca de los residuos de los contenedores comida desechada o vencida y la comen. Esto no puede seguir ocurriendo.

Susana Espósito - Noticia publicada el: Lunes 12/02/24 - (Cantidad de caracteres: 3578)