Conozca
Buenos Aires


MENU PRINCIPAL

  • Home
  • Noticias
  • Historia
  • Barrios
  • Iglesias
  • Plazas
  • Monumentos
  • Arquitectura
  • Cúpulas
  • Puertas
  • Vitrales
  • Pisos
  • Arañas
  • Relojes
  • Aljibes
  • Murales
  • Filete Porteño
  • Curiosidades
  • Perlitas
  • Pasajes
  • Arboles
  • Destacados
  • Postales
  • Día y Noche
  • Ayer y Hoy
  • Museos
  • Bibliotecas
  • Ferias
  • Café - Bar
  • Sabores
  • Donde ir
  • Espectáculos
  • Tango
  • Info al Turista
  • Visitas Guiadas
  • Videos
  • Web amigas
  • Teléfonos útiles
  • Notas en medios

  • Contacto

    Usted es el visitante

    Desde 01/01/2016


    www.conozcabuenosaires.com.ar




    Mundo loco: De una costosa banana considerada obra de arte
    a recorrer desnudos un museo

    A fines de noviembre, el empresario Justin Sun, quien había comprado una banana, considerada una obra de arte de Maurizio Cattelan, por la que pagó US$ 6,2 millones, la comió, tal como había dicho que lo haría el mismo día que pagó por ella.

    La controversial banana pegada con cinta sobre una pared blanca, había sido subastada en Sotheby’s de Nueva York por una cifra seis veces mayor a su precio de base.

    Recorrer el museo desnudosAhora, en Marsella, se presenta una muestra "de arte" para ver al desnudo. Sí, literalmente, al desnudo. "Paraísos naturistas" se presenta en el Museo de las Civilizaciones de Europa y el Mediterráneo, conocido como Mucem, en la ciudad francesa y está dedicada al nudismo social, por eso se hacen visitas especiales y quienes asisten a ellas deben sacarse la ropa para recorrer la muestra.

    Según los datos del museo, desde que inauguró la muestra, en julio, ya fue recorrida por 100.000 personas, y durante las cinco visitas especiales, unas 600 personas lo hicieron desnudas.

    Algunos eran nudistas asiduos y eran fácilmente identificables porque tenían la espalda curtida por el sol y no marcas de ropa en su bronceado. Pero la mayoría nunca habían estado desnudos entre desconocidos, con excepción de alguna zambullida ocasional sin ropa. Para ellos, la desnudez compartida era algo confinado a los dormitorios y vestuarios, o sea para el sexo o el deporte y esta era una manera nueva de relacionarse con el arte, y también con sus propios cuerpos.

    “Por lo general, los cuerpos están muy sexualizados”, dice Jule Baumann, una de las visitantes, de 27 años. “Me gustó la idea de estar en un lugar donde andar desnudo sea totalmente normal.”

    Las muestras donde los visitantes están desnudos no son una novedad: ya hubo en museos de París, Viena, Montreal, Barcelona y Milán, y hasta en la pequeña localidad inglesa de Dorchester. Pero el Mucem bien podría ser el primer museo importante que le dedica una gran muestra a la historia, la cultura y la iconografía del “naturismo”, un concepto similar al nudismo, pero que incluye una filosofía de respeto hacia sí mismo y los demás, así como hacia la naturaleza.

    “Siempre digo que el nudismo es una herramienta, y muy efectiva por cierto, para lograr la aceptación del propio cuerpo”, dice Stéphane Deschênes, presidente de la Federación Naturista Internacional. “Pero el objetivo del naturismo no es ese.”

    La muestra lleva el título de Paraísos naturistas y rastrea el recorrido y desarrollo de ese estilo de vida en Europa durante más un siglo. Arranca con sus orígenes como movimiento pionero de la "salud social" y hace un recorrido hasta llegar al movimiento actual de positivismo corporal, con una amplia exhibición de tapas de revistas, fotos en blanco y negro, videos de archivo, pinturas y textos alusivos.

    ¿O sea que andar desnudo por la vida ¿se considera salud social?

    El viernes fue el último evento nudista antes del cierre la muestra, el 9 de diciembre, y los participantes llegaron justo después de la salida de los visitantes vestidos.

    Compraron sus entradas y luego procedieron a desnudarse en un vestuario ad hoc. Para cruzar el vestíbulo del museo hasta la sala de exposiciones, que afortunadamente estaba bien calefaccionada, muchos se envolvieron en toallas o se cubrieron con un pareo. Amélie Lavin, curadora de la muestra, dice que “al principio hacía mucho frío”, pero que el Mucem se encargó de solucionarlo.

    Bueno, de acuerdo a esa situación, quien escribe esta noticia duda nuevamente sobre la "salud social" que tanto predican, porque si hacía tanto frío, lo más probable es que hayan salido de allí con una gripe colectiva.

    Mundo loco y ridiculez total!!! Algunos llevaban morral -nuestro cuerpo no tiene bolsillos-, un hombre combinó un sombrero de fieltro con sandalias de cuero, y una mujer jugueteaba con un llamativo collar que colgaba entre sus pechos. Y a no olvidar que estamos en Francia: un hombre mayor se envolvió suavemente el cuello con su pequeña toalla rosada a modo de bufanda.

    “En los museos vemos todo el tiempo formas desnudas y no solemos pensar en nosotros mismos como un cuerpo”, apunta Maggie Kurkoski, de 34 años, una historiadora de arte que asistió con su esposo. Kurkoski reflexiona sobre la dinámica de poder que implica estar vestido mientras se dibuja a un modelo vivo sin ropa o se analiza una estatua desnuda, y agrega que le gustaba aprender sobre el naturismo mientras “observaba cuerpos y al mismo tiempo me sentía cómoda con mi propio cuerpo”. O sea que muchos, más que para ver las obras, fueron para ver a los demás desnudos y poder compararse con ellos...

    “Mirar a una chica totalmente desnuda no es excitante”, dice Éric Stefanut, director de comunicaciones de la Federación Naturista de Francia. Los naturistas, explicó, ven gente nueva desnuda todo el tiempo. “Así que es más bien aburrido”. El argumento tiene su lógica: cuando en una sala todos están desnudos, nadie se destaca, aunque entre los visitantes del viernes había muchos tipos de cuerpos. Había tatuajes y pezones con piercing, torsos de costillas marcadas o barrigas carnosas, cabezas calvas y barbas ralas. Había escrotos y pechos que se bamboleaban. Y algunos cuerpos mostraban cicatrices de cesárea. Desnuda de la cintura para arriba, una mujer muy mayor recorrió la exhibición en un scooter eléctrico...

    Cuentan que después de la última visita, algunos dirigentes del naturismo francés fueron a celebrar a la casa de Stéfanut. Dejaron sus zapatos junto a la puerta de entrada y la ropa sobre la cama, con la ropa interior metida bajo los abrigos, como las bufandas en las fiestas de las personas “vestidas”. Entre porciones de pizza y copas de vino blanco, conversaron sobre la operación de éste, sobre las vacaciones de aquél, y sobre la todavía reciente victoria de Francia sobre Argentina en un partido de rugby. Bueno, al menos les sirvió de consuelo después de haber perdido el Mundial de Fútbol 2022, en el que Argentina les ganó en Qatar y aún no pudieron pasar el mal trago, ni vestidos, ni desnudos!!!


    Susana Espósito - Noticia publicada el: Miércoles 11/12/24 - (Cantidad de caracteres: 6080)




    Página Declarada de
    Interés Cultural
    (Legislatura CABA 512/2004)


    Auspiciada por:
    El Ministerio de Cultura del GCABA
    Res. 2027/2005
    y la
    Subsecretaría de Turismo del GCABA Res. 065-SSTUR-07